martes, 30 de noviembre de 2010

En serio???

Se planteaba una noche tranquila y aburrida, ir al Scream (pub de marras situado enfrente del Lidl y a cosa de 7 minutos de casa en el coche de san fernando). Goleada del Barcelona al Madrid, 5-0. Yo previamente había quedado con mis colegas del metal en ir a un garito de los nuestrosllamado Hollywood and Vine, y Aitor y Carmen decidieron apuntarse finalmente, aunque iban antes a casa para no sé qué cosa. Nevada de la ostia. Salimos del Scream, y me dispongo a esperar a Sera y a Pablo (mis colegas del metal) en el Lidl. Me echo una guerra de bolas de nieve con un nota sacado del periodo neandertal y su colega el negro que estaban tirando bolas a la gente que pasaba y yo, como buen espaÑol, empecé a tirarle bolas sin más. Nos lo pasamos de puta madre hasta que se fueron. Me entretengo mirando las ofertas del Lidl y llegan Sera y Pablo, nos dirijimos al antro de marras y al abrir la puerta.... Zas en toda la boca. Pura siderurgia, puro metal sacado de lo mas profundo de las calderas de Mordor en el Monte del Destino... Nos miramos los tres con cara de: Oh si, esto sí que mola... Entramos, contemplamos el antro -bastante grande y apañao-, contemplamos la guitarra de Slash (no es coña), y nos pedimos unas birras (2'5 libras, pero la entrada es gratis). A esto que llega un nota y le dice a Sera: "me gusta tu pelo, METAL". En ese momento, y si no fuera por lo cieguísimo que iba el nota, lo habría dejado subirse +5 niveles al liderazgo. Le damos de lado y nos sentamos, cinco minutos mas tarde se nos presenta y educadamente pregunta si se puede sentar con nosotros, nos miramos... "vale" le dijimos, y el colega responde con un contundente: "metaaaaaaaaaaal". Dios, qué crack. Hablar con dicho personaje cuyo nombre me suena a algo asi como /'eggs/ era partirte la polla -salvo a Pablo que se le sentó al lado y le dio chico coñazo, pero era un borracho coleguita y sobretodo muy muy muy muy friki (dije muy?).
El antro en cuestión tiene unas jarras de cubatas a 6 libras de las cuales salen unos 6-8 vasos pequeños, lo que incita al alcoholismo y no al cervecismo. Descubrimos que hay billares a 50 céntimos -aunque por las tardes son gratis- y decidimos echarnos uno. Al rato, cerraron las puertas del bar y supuestamente cerraron la barra (digo supuestamente porque seguían sirviendo), el caso es que vimos algo que... oh Satán.... OH SATÁN!!! dos negras jugando al billar y fumando! nos quedamos un poco como que: "se puede fumar aquí???" y nos dijeron: "sí, claro, pero solo cuando cierran las puertas!!" Cómo y cuantísimo echaba de menos tomarme una puta cerveza o un algo con un cigarro DENTRO de cualquier sitio.... Oh sí, esto sí que es el antro definitivo.

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